Por: Servimedia.es 25/05/2013 13:50
- Durante una jornada organizada por Aspaym Cataluña
Distintos expertos reclamaron este sábado potenciar la figura del
'asistente sexual' para personas con algunas discapacidades,
garantizando así la igualdad de derechos y oportunidades para todos.
Así lo hicieron durante la jornada
sobre 'Sexualidad, diversidad funcional y la figura del asistente
sexual', organizada en Barcelona por la Asociación de Parapléjicos y
Grandes Discapacitados Físicos de Cataluña (Aspaym Cataluña).
Durante
la misma se presentó la figura del 'asistente sexual' como un
acompañamiento destinado a hombres, mujeres o parejas con algún tipo de
discapacidad que, independientemente de su género o elección sexual,
deciden optar por esta posibilidad.
La
psicóloga del Instituto Guttmann Ana Gilabert explicó que la sexualidad
es un aspecto central del ser humano durante toda la vida, y apostó por
la búsqueda de alternativas "de la forma más imaginativa posible". "La
sexualidad, como aspecto positivo y enriquecedor de la vida de las
personas, es también patrimonio de todos, y la diversidad funcional o la
discapacidad no debe anular este aspecto", subrayó.
Para
Gilabert, uno de los problemas es la autoestima de la persona con
discapacidad, para lo cual "se deben aplicar recursos y estrategias para
que la persona sea capaz de adaptarse a los cambios y volver a percibir
la sexualidad como algo positivo, apetecible, estimulante y lúdico,
aspectos importantes para poder volver a disfrutar de la sexualidad".
La
psicóloga también apostó por "tratar el tema de la sexualidad desde la
infancia, educar desde la pluralidad, integrando las diferencias,
teniendo una actitud abierta y accesible".
A
su vez, el miembro del Foro de Vida Independiente y del Grupo Sex
Asistent de Cataluña, Rafael Reoyo, dijo que "las personas con
diversidad funcional sienten y aman como todas, a la vez que tienen los
mismos derechos inherentes y las mismas necesidades vitales".
Por
ello, Reoyo explicó que la asistencia sexual "es una opción basada en
la autodeterminación que propicia una sociedad inclusiva, y es un medio
para mejorar la vida emocional y sexual de todas las parejas". Se trata,
indicó, de una propuesta concertada y remunerada, "que apoya la salud
sexual y emocional de las personas con diversidad funcional".
IGUALES PERO DIVERSOS
Durante
el acto inaugural de la jornada, la directora de Servicios
Territoriales del Departamento de Bienestar y Familia de Barcelona,
Carme Canela, dijo que todos somos personas afectivas y sexuales,
personas iguales pero diversas. "Todos los poderes públicos debemos
garantizar la dignidad, la independencia, la igualdad entre hombres y
mujeres, la no discriminación, la libre elección y, en definitiva, la
igualdad de oportunidades", indicó.
En
este sentido, explicó que se está trabajando para proteger los derechos
de las personas con discapacidad y su felicidad, "suprimiendo las
barreras y garantizando la figura del asistente sexual, porque debemos
normalizar el tema, informar y evitar abusos".
Por
su parte, el regidor de Sant Andreu, Raimon Blasi, recordó que los
servicios sociales disponen de un comité de ética y sexualidad. "Es muy
importante abordar la sexualidad de las personas con diversidad
funcional, que en muchas ocasiones no tiene el reconocimiento
necesario", declaró.
Además, el
responsable de la Unidad de Lesión Medular del Instituto Guttmann, Joan
Vidal, destacó la importancia de abordar "los aspectos eróticos en la
persona con diversidad funcional" y se mostró interesado en participar
en "nuevas ideas", como la figura del asistente sexual.
A
su vez, la presidenta de Aspaym Cataluña, Patricia Carmona, explicó que
"la idea de esta jornada es romper barreras y tabúes sobre la
sexualidad de las personas con diversidad funcional".
Durante
la misma, los distintos expertos y ponentes plantearon la sexualidad
humana desde una perspectiva más amplia que la genital, al tiempo que
desmintieron la idea de que las personas con determinadas discapacidades
no tienen vida sexual o no pueden tenerla.
También
se pretendió acuñar el nuevo concepto de 'diversidad sexual' a la hora
de hablar de la sexualidad de estas personas, subrayando que es un
derecho a reconocer y facilitar, no más allá de la discapacidad sino a
partir de la riqueza de la diversidad.